La hipótesis es que el nuevo escenario es muy dinámico e inmediato. La disrupción del sistema económico tradicional se llevará por delante muchas cosas hasta ahora habituales. Resulta difícil prever cuándo y cómo será, pero no cabe duda que con la asunción de la blockchain la manera de emprender y hacer negocios se verán afectados. Puede ser un cisne negro o una transformación desde los centros de poder. La transformación está llamando a la puerta, porque los indicadores y controles económicos marcan señales inequívocas. Esto nos obliga a observar los negocios en clave de oportunidad y en tiempo real. Algo para lo que no estamos aún preparados; ni empresas, ni trabajadores, ni emprendedores, y mucho menos la Administración.
En muy poco tiempo deberemos poner en juego muchos recursos a la vez, y no principalmente económicos. Esto nos lleva a reflexionar sobre la oposición entre estructura y oportunidad. Igual que la reflexión sobre rigidez y elasticidad. El resultado de productos o servicios, en muchas empresas, son consecuencia de una estructura, un conocimiento, una distribución, una producción, y una relación con proveedores. A partir de esas relaciones se configura el negocio. Pensar en clave de oportunidad y tiempo real es seguir el proceso inverso. Pensar en el modelo de negocio, pensar en los productos o servicios de ese modelo, y a partir de ahí, enfatizar la estructura necesaria para explotar el modelo en un periodo de tiempo más corto. Más adelante ya pensaré cómo desmantelo la estructura para ver la siguiente oportunidad. Todo esto puede sonar un poco etéreo, pero es lo que viene haciendo Amancio Ortega con Inditex.
Resolver las preguntas es tener media solución
Esto nos lleva a preguntarnos: dónde se encuentra el valor, cuál es la importancia de la estructura, cómo se relacionan ideas y estructura. Si no somos capaces de verlo, no podemos llevar adelante nuestro negocio. Muchas empresas no están cambiando su modelo de negocio, sólo están modificando el modelo. Su formato está definido por hacerse más ligeras, reducir su tamaño, reducir su personal. Pero, cuando esta situación pase creen que mantendrán su nivel de facturación. No será así, hay demasiadas amenazas ubicadas en otros países con muchas ganas de ganar mercados con rapidez.
No adaptarse a lo que ya está aquí, tiene un alto precio. Es complejo, desconocido y necesita no sólo desarrollar, sino detectar y acotar. Imposible hacerlo solo sin ayuda de otros.